La casa forma un paralelepípedo compuesto por 2 volúmenes, un volumen opaco calentado y un volumen transparente sin calefacción. Tiene así dos caras, una ligera con revestimiento de policarbonato (lado jardín), la otra rugosa y opaca con revestimiento de fibrocemento (lado calle). La fachada al frente se expresa según el deseo de luz, transparencia, privacidad, protección o ventilación. Las contraventanas en forma de acordeón pueden cerrarse completamente formando una concha o abrirse completamente en más de 6 metros de ancho, la fachada vive al ritmo de los usuarios. Los clientes querían una casa con un gran jardín de invierno que les acercara a la naturaleza. El invernadero amplía su espacio habitable hasta las vides de champán. Este volumen también puede proporcionar a la vivienda una fuente de calor pasivo cuando hace frío. En caso de sobrecalentamiento en verano, las grandes contraventanas en forma de acordeón y los marcos de ventilación retráctiles en la parte superior se abren hasta una anchura de 18 metros y ventilan mediante efecto chimenea.